De nuevo llega un cambio a tu vida… se cierra una etapa, acaba una relación, un trabajo que no te motiva, un negocio que no da dinero, un cambio de ciudad, de país. Estás confundido y parado en el camino… frustrado, porque de repente, te das cuenta de que tu vida, no es lo que te hubiera gustado que fuera.
¿Dónde quedaron todos aquellos planes de vida? ¿Mis sueños? ¿Todo aquello que prometí hacer y se quedó en el camino?
Te das cuenta, de que no tienes fuerza, ni ganas. De que falta un componente en ti para que tu vida cambie hacía donde quieres, pero por mucho que piensas y analizas, no sabes ponerle nombre ni lo sabes identificar…Ha pasado tanto tiempo… que no sabes dónde quedó tu verdadera esencia. Esa que te hacía sentir pleno, te hacía sonreír. Te hacía sentir fuerte y seguro.
“La experiencia no es lo que te sucede, sino lo que tú haces con lo que te sucede”. A. Huxley.
Es el momento perfecto para preguntarte sin rodeos ni excusas:
– ¿Qué es lo que quiero hacer con mi vida ahora?
– ¿Cuáles son mis creencias y valores?
– ¿Cómo está la confianza en mí mismo en estos momentos?
– ¿Cuáles son mis dones y talentos?
– ¿Estoy dónde quiero estar?
– ¿Por dónde empiezo…?
Está en tus manos la posibilidad de elegir, qué quieres hacer ante lo que te sucede. Tienes el poder en ti para decidir, de hacerte consciente de tus acciones y re-acciones y con ello, asumir por entero tu responsabilidad ante lo que está sucediendo en tu vida.
Toma las riendas de tu vida y toma el momento que está viviendo como una nueva oportunidad. Pásate a una actitud positiva y muévete! Todo está en continuo movimiento y eso no cambia por eso, es el momento de abandonar el papel de víctima y empezar al ver el mundo desde otras perspectivas.
No dejes que otros decidan quién eres y lo que tienes que ser. Nadie mejor que tu para saberlo y sacar de ti aquello en lo que crees y define tu esencia. Apuesta por ti! Cuanto más te conozcas, más te aceptarás y más te querrás!. Es tu momento y tú eres el protagonista.
Se responsable de tus decisiones y de actos y no dejes en manos de otros tus respuestas. Compromete con tus pensamientos y acciones. Sé coherente con tus valores y creencias. Pon el tu mente el camino que quieres tomar, no el que elijan los demás.
Invierte en ti mismo, en tu crecimiento y desarrollo personal, alimenta tu mente. Sé la mejor versión de ti mismo que puedas ser.
Desempolva tus talentos y fortalezas, esos que te definen como ser único y diferente.
Decide acabar el día contento y satisfecho con aquello que hiciste o con lo que no hiciste. Cada paso por pequeño que sea, bien orientado te llevará a donde quieres. Pasito a pasito!!!
Es posible ser el líder de tu vida y desde ahí ser el líder de todo aquello que te propongas hacer, si así lo decides y te lo propones.
Es tu nueva actitud de vida, donde ya no eres víctima de tu entorno, sino que tú decides hacía donde te diriges para lograr tus objetivos. Vive de verdad tu vida como quieres y como siempre has deseado y nunca más la de los otros.
Céntrate en lo que quieres lograr y desarrolla una estrategia que te ponga en acción para lograrlo.
Decide, comprométete y ponte en marcha hacía tu objetivo.
Define, escribe y planifica. Cuando más detalle y exactitud, mejor! Ten claro a dónde quieres llega, para no estar dando vueltas.
Crea nuevos hábitos y creencias que te impulsen. Ojo! con las personas de nuestro entorno que no nos favorecen. Cree en ti, tu actitud es vital! Imagina que ya has alcanzado tu objetivo y verás que bien te sentirás!.
Prioriza lo que vas a hacer, cada día para que te acerque a tu meta.
Siéntete merecedor de todo lo que estás creando en tu mente!
Agradece, agradece cada día todo lo que tienes, todo lo que has aprendido, el momento de la vida que estás y el camino que has decidido emprender.
Personalmente a mí lo que más me impedía avanzar eran creencias muy arraigadas desde niña, muchos sentimientos, costumbres y pensamientos, transmitidos.
Tu mente ha sido condicionada desde la niñez, desde que empezaste a comprender el lenguaje hablado, la gran mayoría de esos condicionamientos fueron para tu propio bien, pero muchos de ellos que aún siguen teniendo efecto en tu vida adulta, no fueron precisamente para tu bienestar o tu provecho.
Muchos de esos condicionamientos fueron accidentales, la mayoría sin pensar en el efecto que tendría en tu vida futura, o el efecto emocional que tendría en ti, creencias que fueron inculcadas por nuestros seres más allegados. Sabiendo y aceptando primero el hecho de que esas palabras dejaron una herida o marca en nuestra vida, ahora tienes la capacidad de identificar el problema y más importante aún, muchas herramientas para darle un giro de 180º a tu situación y a realizar un cambio favorable para ti.
Ahora solo tienes que ponerte manos a la obra y empezar a diseñar tu nueva vida, yo estaré encantada de poder ayudarte personalmente a lograr los cambios que deseas. Te ayudaré a descubrir cuáles son tus obstáculos, dudas y miedos, sabrás decidir qué paso quieres dar para avanzar y a tomar el control de tu vida y por lo tanto de tu felicidad. Contacta conmigo aquí.
Un Abrazo,
Paloma
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